Cómo llegué a ser papá canguro, por Kiko. «Papacito, cógeme»
Artículo de Kiko Valle publicado originalmente en su blog Tu papá te mima, blog sobre «crianza natural, pedagogía y educación, experiencias e inquietudes de papá» y reproducido aquí con permiso de su autor. Podéis ver la publicación original aquí. Lo reconozco. Yo compré un carrito. Como «todos» los padres. El mejor posible. De los mejores, el mejor. Y leí sobre ello. Pero parece cierto que «cuando un tonto agarra un camino, o se acaba el camino o se acaba el tonto». Eso ocurría. A veces nos centramos tanto en algo que no somos capaces de ver más allá. Como los pobres caballos, con los ojos casi tapados para que no desvíen la mirada. A El Corte Inglés, tarjetazo y a empujar. Han sido los mil y pico de euros peor malgastados por sus abuelos, que se lo regalaron con mucho amor y nuestras orientaciones. Y me pueden tachar de radical, pero un carrito no hace falta para nada, salvo para llevar la compra, los chaquetones de sobra y la cantidad de estupideces que con una buena previsión dejaríamos en casa. Otra vez nos damos de bruces con la naturaleza. Nos caemos de boca en la candela. Tropezamos. Y es que el instinto vuelve a ser el viejo sabio que asoma a la cabeza y los corazones de los que se dejan. A los niños hay que llevarlos en brazos. Es muy simple. No hagan caso de pediatras comprados, psicólogos trasnochados, familiares y amigos que intentan hacerles ver lo contrario. No me hagan caso a mí, por supuesto. Sólo déjense llevar por el momento, por lo que les dicten sus entrañas. Tendemos a interpretar como malo aquello que tiene que ver con los sentimientos, porque parece que contraviene a la razón. Nada más lejos de la realidad. Identificamos lo moderno con lo mejor y radicalmente opuesto a lo tradicional, lo antiguo, lo rural y lo primitivo, que pasa a ser lo peor. Esto no tiene razón de ser. Hacemos lo que manda la masa y seguimos aborregados los dictámenes de la publicidad y lo comercial. Nos engañamos a nosotros mismos privándonos y privando a nuestros pequeños de una vida placentera y saludable por el qué dirán, por aparentar, por ostentar un poder en una jerarquía absurda. Además, lo que hacemos, lo que hacen todos, si no es lo mejor, no puede ser malo ¿no? Pues voy. Numerosos estudios han demostrado que llevar a los niños en el carrito, especialmente durante los primeros meses y años de vida, produce un desarrollo mermado de sus capacidades lingüísticas, motoras y espaciales. Desde que a partir de los sesenta se inventaran las sillitas o carros plegables con distintas funciones, se estila además, llevar a los niños mirando hacia delante, con lo que el contacto visual con sus padres, o quien los pasee, es menor. Incluso se ha podido medir que aumenta el ritmo cardíaco e influye en los patrones de sueño, originando más estrés y ansiedad en los bebés. Por si fuera poco, el aumento en el uso de minicunas y carritos hacen que el bebé pase cada vez más tiempo acostado. Cuando esto ocurre durante los primeros meses de vida, mientras el cráneo es moldeable, se corre mayor riesgo de producirle una plagiocefalia (deformación del cráneo) al bebé, y después es probable que queramos corregirle ortopédicamente con molestos cascos terapéuticos. Otras veces esto viene predeterminado por problemas en la gestación o partos instrumentales donde se han usado fórceps, ventosas y demás maniobras salvajes. Sí, han leído bien: me parecen salvajes. Pero en el sentido peyorativo del término, sin ninguna connotación positiva. Vemos como...
Read MoreTodo sobre… la «Cruz Envuelta»
“Todo lo que necesitas saber sobre la Cruz Envuelta” Este artículo pertenece a una serie de monográficos que publica Red Canguro sobre distintos anudados de fular portabebés, basadas en las experiencias de las madres del foro de Red Canguro. Encontrarás recomendaciones de uso, trucos, vídeos con instrucciones, ¡y más! Todos los nudos tienen una forma más “básica” y luego, las múltiples variaciones que sobre ese nudo se pueden hacer, dependiendo de la práctica del porteador, de sus comodidades, del fular del que dispone, etc. El primer nudo que los papás y mamás suelen aprender y utilizar, tanto en fulares elásticos como tejidos es la cruz envuelta. La cruz envuelta se suele recomendar como el nudo ideal para iniciarse en el porteo por ser bastante sencillo y lograr una posición fisiológica para el bebé. Las recomendaciones para comenzar a practicar, especialmente si es una de las primeras veces que te colocas a un bebé en un portabebés, son: practicar con un muñeco de peluche, muñeco “salao” o similar si ya lo haces con un bebé “de verdad”, y no te sientes del todo segura, puedes hacerlo teniendo una mamá canguro experimentada cerca, u otro adulto que te de serenidad y seguridad, para colaborar si es necesario. ayuda al principio mirar cómo va quedando el nudo ante el espejo. Si decides probar la cruz envuelta con un bebé pequeño, tienes que tener en cuenta varias cosas. Principalmente estar bien tranquila y relajada, para poder atar y ajustar bien. Elige empezar a probar luego de que el niño esté alimentado, limpio y descansado, cosa que él esté también tranquilo, con sus necesidades básicas satisfechas. Estate atenta a que su cabecita esté sujeta y todo el fular tenso sujetando la curvatura natural de su espalda, que su espalda quede en forma de «C», lo que fomenta la postura ranita, prestando atención en que las rodillas del bebé queden más altas que su culete, así el bebé no queda con sus piernitas estiradas, respetando la postura fetal ¡Siempre recuerda hacerlo con mucha atención y cuidado! Principales características del anudado La cruz envuelta es un nudo en el que el bebé va posicionado adelante, barriga con barriga con su porteador. Es un nudo de una capa, pero con la particularidad de que al desplegar las bandas que bordean el cuerpito del bebé, se convierte en un nudo de dos o tres capas, según la cantidad de bandas que despliegues. En este anudado, los tirantes cubren los dos hombros, y se usa tanto con fulares elásticos como tejidos. Es uno de los nudos que más tela requiere así que, si es tu inicio en el porteo, ten paciencia hasta que te acostumbres a manipular tanta cantidad de tela. Pero ya verás cómo agradeces tanta tela; es un nudo en el que el niño queda bien colocado, bien repartido su peso, y al desplegar bien las tiras sobre tu espalda, no sientes tensión en el cuerpo. Si decides desplegar las bandas laterales, las dos bandas forman parte del asiento, dándole al anudado mayor soporte, primero desplegando la banda interna del nudo, que tiene naturalmente más soporte, y luego si deseas, puedes desplegar la otra banda, la externa, que suele ya quedar un poquito más floja. Las bandas de tela que bajan por el lateral de la espalda no deben cruzarse en medio de la espalda, sino bajar por el lateral y cruzarse debajo del culito del bebé. Es un nudo que puede utilizarse preanudado; primero se hace el nudo, y una vez que el nudo esté hecho, se coloca dentro de él al bebé. En esta variante, sólo posible con...
Read MorePortabebés…. de la mano de tu pareja
Artículo de Inmaculada para Red Canguro. La llegada de un bebé, por lo general, conlleva tremendos cambios en la vida de la estrenada mamá, y por consiguiente, en la vida de la pareja. En la mayoría de los casos, fruto del amor de ambos, nace un pequeño ser totalmente indefenso y desvalido que precisa, no sólo alimento, sin o también e igual de importante, calor, contacto, cuidados continuos, amor… Si la pareja no tenía hijos y tenía por costumbre pasear por la calle de la mano, e incluso, agarrados del talle, se encuentra con que el bebé y el carrito cambian radicalmente sus paseos. El carrito debe ser llevado con los dos brazos y bien agarrado con las manos y debemos estar pendientes para hacer frente a innumerables barreras arquitectónicas, de las que anteriormente, ninguno de ambos miembros, eran por lo general conscientes: escaleras, aceras muy altas y/o muy estrechas, rampas, puertas que se resisten a abrirse y que se nos cierran en cuanto intentamos pasar con nuestro peque en el carrito, ascensores estrechos, pasillos en tiendas y comercios donde casi no caben dos personas que se cruzan (por tanto, menos todavía un cochecito de bebé), garajes públicos de vehículos sin ascensor, obras en la calzada y un largo etcétera; sin hablar si intentamos hacer una excursión o eramos aficionados al senderismo. Con todas estas dificultades es impensable intentar ir de la mano de tu pareja si tenías costumbre e incluso ir al lado de ella y de tu hijo/a. El uso de un portabebés cambia la escena radicalmente, puesto que te olvidas de las barreras arquitectónicas, y además, puedes volver a pasear compartiendo en intimidad dicho paseo con tu pareja, de la mano y mirando ambos la carita del bebé, posiblemente dormido suavemente mecido por el movimiento del paseo y el contacto íntimo con mamá o papá. Momentos que nos llenan de ternura y que compartimos con una sonrisa con nuestra pareja y una mirada cómplice, orgullosos ambos de ese pequeñín/a fruto de su amor. El bebé va creciendo y los gestos de cariño que ve en sus progenitores cuando van paseando, se convierten en algo absolutamente cotidiano y normal en su vida. Llegará un momento en que será también capaz de dar besos y caricias y de solicitarlos a la persona que lo portee en ese momento e incluso de la que va a su lado de la mano o del talle; compartiendo por tanto cariñosos y emotivos gestos familiares. Mientras, aunque los momentos de intimidad de la pareja no son tantos como lo eran antes o son más breves, podrán ser complementados con otros gestos de cariño y compenetración en los paseos con su bebé, que cuiden y fortalezcan la unión y el amor de la pareja. Y no os perdáis este precioso baile 🙂...
Read MoreEl papá canguro 2011 disfruta de su premio :)
Carlos Sacanell, ganador del premio «Arturo, Papá Canguro 2011» nos escribe contándonos lo que le ha parecido su premio, un fular Zara de Elevill donado por Canguritos. ¡Gracias por compartirlo con nosotros, y seguid disfrutándolo así! «¿Cómo se hace cuando encuentras tu sabor de helado favorito? ¿Dan ganas de probar nuevos? ¿Y si has tenido unas perfectas vacaciones, en el lugar de tus sueños? ¿Arriesgarse a que en las próximas todo no sea tan bueno? Mmmmh…no sé. Soy, ante todo, conservador en algunas cosas (dejando de lado la discusión política), por eso, me cuesta hacer cambios (radicales y no tanto) en mis costumbres. Pero cuando los cambios vienen con “una ayudita de tus amigos” como dirían Lennon y Mc Cartney la cosa cambia un poco. Nunca antes había probado sushi antes de que mi esposa me insistiera, ¿para qué?, si la pizza y el asado (muy argentino lo mío) llenaban mis expectativas alimentarias básicas. Sin embargo, hoy, gracias a ella, no puedo pensar en una mejor opción a la hora de comer algo rico, sumado el hecho de que he incorporado la posibilidad de probar cosas nuevas en el ámbito gastronómico más o menos a partir de ese salto con ayuda hacia los sabores orientales. Por eso en principio yo, fanático del Mei Tai, miraba a mi esposa Irene con desconfianza mientras se colgaba a nuestros hijos en un fular. Mi pensamiento era: “está muy bien para ella, que se pasa horas en la Red Canguro, mira videos, practica, pero para mi la simplicidad del Mei es única”…pero allí vino la “Little help of my friends”, y ganamos (Camilo y yo) el concurso Arturo, papá canguro. Admito que mi primera reacción fue: “El fular es lindo, cómo lo va a usar Irene”, pero bueno, a fuerza de que me gustó, de sentirme parte de algo importante a partir del concurso, lo probé, lo usé, me lo puse con ayuda de la experta de la casa, y ya lo estamos disfrutando todos, o más bien, Camilo y yo, los ganadores de este año. Agradecido por el premio y por la ayudita de abrirnos a mí y a mi familia a nuevas experiencias para estar más unidos, saludo desde argentina y les mando unas fotos disfrutando de nuestro premio. Carlos...
Read More¡Feliz semana de la crianza en brazos! Video conmemorativo
Ana Cárdenas nos ha regalado este precioso vídeo para conmemorar esta semana, que es nuestra fiesta. Muchísimas gracias a ella y a l@s demás… ¡disfrutadlo!
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